Intervención de la Veeduría Ciudadana ante el:
FORO REGIONAL
TÚNEL DE ORIENTE: MITOS Y REALIDADES
Institución Educativa Julio Sanín, Rionegro
5 de Agosto de 2014
El Túnel de Oriente
“Una historia con muchos
velos”
Nuestra Veeduría Ciudadana consciente de sus deberes y derechos
constitucionales y como observador del proceder de las entidades públicas
comprometidas en la promoción de este proyecto, queremos contribuir a descubrir ante ustedes algunos de los velos
que tapan nuestros ojos y oídos, de esta historia de gestión irregular del
megaproyecto conocido como “Túnel de Oriente”
En primer lugar, compartamos
qué es una Veeduría Ciudadana
Es una organización ciudadana
que hace parte de la Sociedad Civil y busca ejercer el derecho a participar como
ciudadanos, a la luz del respeto por la Constitución Política, las Leyes y las
normas. El respeto a la Constitución, las
Leyes y las normas es la única vía que nos posibilita la vida en sociedad. Las
Veedurías no pueden evadirlas,
interpretarlas o desacatarlas en forma amañada para favorecer intereses
particulares. Esto constituye un acto de
consecuencias graves para todos y más aún, cuando quienes lo hacen, son los gobernantes y administradores de nuestros
recursos públicos valiosos.
Toda Veeduría Ciudadana debe tener un
propósito constructivo en el desarrollo del concepto de País, y en este
propósito debe avanzar para aportarle a
la lucha contra la corrupción.
Es así, que los veedores ciudadanos
somos personas del común, que estamos
dispuestos a prestar un servicio social a la comunidad, haciendo;
seguimiento, vigilancia y control social a la administración pública, a
procesos y proyectos en general que nos pueden afectar a todos de una u otra
forma. Ahora bien, toda Veeduría Ciudadana debe
especializarse en un asunto en particular y conservar total independencia
económica y política de quienes están interesados en promover dicho asunto. En
nuestro caso, es la construcción del megaproyecto “Conexión Vial Aburrá-Oriente”
Nuestro país, Colombia,
es un Estado Social de Derecho. Y nosotros como
veedores ciudadanos, estamos convencidos
que nuestros esfuerzos y capacidades están puestos al servicio del proceso
constructivo de una sociedad, con; mejores criterios para vivir en paz, capacidad
para resolver los asuntos que le competen colectivamente y lograr niveles
evidentes de respeto por los deberes y derechos que todos y cada uno de
nosotros tiene.
Además, debemos estar dispuestos a
contribuir en la construcción de mejores
conceptos de Desarrollo y de Progreso; que sean más justos para la sociedad, que sean más armónicos con la naturaleza, y en nuestro caso, que sean más respetuosos con los ecosistemas que nos
proporcionan el agua, sustento real y sagrado para nuestra vida en este
planeta.
Ahora, entremos en materia. Comencemos
a descubrir los Velos que tapan nuestros ojos y oídos:
1.
VELO – DE LO JURÍDICO AMBIENTAL DEL “TÚNEL DE ORIENTE”
En 1996 el entonces Gobernador de Antioquia, posteriormente Presidente de
nuestro país por dos períodos seguidos, y hoy Senador de la República, le
solicitó al Ministerio de Ambiente que obviara
el Diagnóstico Ambiental de Alternativas. Con este acto solamente, comenzó todo el proceder ilegal que se ha
demostrado en este megaproyecto.
¿Por qué un Diagnóstico
Ambiental de Alternativas es un estudio tan esencial?
Porque mediante este estudio se puede establecer; cuál es la ruta por donde
se generan menos impactos ambientales
con un proyecto, cuál es el número de
población que se beneficia, que nos cueste
menos a todos y que el Estado
cumpla su responsabilidad de manera transparente y eficiente.
Para agregar a la anterior ilegalidad, CORNARE otorga la licencia del 2002,
licencia viciada de nulidad. Gracias
a la labor de vigilancia de las Organizaciones Ambientalistas, esta licencia
fue declarada NULA por el Tribunal
Administrativo de Antioquia en el 2009, justamente porque faltó el Diagnóstico Ambiental de Alternativas al
que nos estamos refiriendo.
Además, CORNARE apela el fallo del Tribunal y así demostró
su verdadera condición de desacato frente a su responsabilidad
constitucional y su deber legal de
proteger el medio ambiente. A cambio, favoreció los intereses de la
Concesión y del entonces gobernador Luis Alfredo Ramos.
En síntesis, CORNARE otorgó
una licencia viciada de nulidad por falta del Diagnóstico Ambiental de Alternativas.
Abramos un paréntesis: En este
espacio Denunciamos públicamente, que de manera evidente dicha Corporación se
ha dedicado a legalizar lo ilegal.
CORNARE ha ido en contra
de todos los principios y derechos que tenemos; al goce de un ambiente sano, a la
conservación de nuestras áreas protegidas y al agua como derecho fundamental y
vital para la humanidad.
Todo lo anterior se demuestra
mediante la bitácora de acciones y argumentos empleados para justificar su
proceder indebido, en los distintos actos administrativos de dicha Corporación. Cerremos este paréntesis.
Ahora bien, después del FALLO del
Tribunal Administrativo de Antioquia en el 2009, hallamos además otras irregularidades,
como las siguientes:
·
Que esa licencia fue otorgada para un solo tubo, aunque en realidad se iban a construir dos.
Es decir, iban a producir más del
doble del impacto -daño ambiental-. Con el agravante de que los ciudadanos no
habíamos sido informados de manera veraz y oportuna al respecto. Ese era un
asunto con el que pretendían también pasar
inadvertidos.
·
Que los estudios de impacto ambiental del megaproyecto eran insuficientes
y debían ser profundizados y complementados.
A esto, la Gobernación de Antioquia, dueña del megaproyecto, entregó el Estudio de Impacto Ambiental Actualizado
2013.
Un año después, la Contraloría General de la República reveló con su Función de Advertencia de Junio de 2014,
que los estudios siguen siendo
inconsistentes y carecen de análisis fundamentales. Especialmente para la fase
de construcción, como los relacionados con la contaminación de las aguas por efectos del vertimiento industrial –material
producto de la perforación-, que produciría el túnel.
En otras palabras, las quebradas no
estarían en capacidad de recuperarse ante dichos vertimientos contaminados y perderían su caudal irreversiblemente
– sin posibilidad de recuperación.
·
Que el trazado actual del Túnel de Oriente es ilegal, pues intervendría
la Reserva Forestal Protectora Nacional
del Río Nare en una de sus zonas más
frágiles, por ser altamente vulnerable y con baja capacidad de recuperación.
Este bien es patrimonio público de
la Nación, es nuestro. No se puede intervenir sin permiso previo de la
autoridad responsable, el Ministerio de Ambiente.
La intervención de esta Reserva provocaría
un daño grave e irreversible ya que presta
un servicio ecosistémico valioso
como el de proveer agua para el consumo
humano y para el sustento de la flora y la fauna. Es decir, para el sustento de la vida misma.
En efecto, nos referimos justamente al Stock de Samarcanda en donde se
encuentran la quebrada La Yarumal y La Honda, recurso hídrico valioso para los habitantes
de los municipios de Rionegro y Guarne.
Ahora, nuestra responsabilidad como Veedores es resaltar que con la
situación que vivimos actualmente ante los Fenómenos
de Cambio Climático y de El Niño,
resulta totalmente inadmisible, desde
cualquier punto de vista, aumentar las amenazas con este megaproyecto y poner así en riesgo el agua.
Y como resultado de lo anterior, se está
violando un principio legal sagrado que es el Principio de Precaución. Esto significa que primero hay que evitar el daño, que tener que repararlo después.
Ahora los invitamos a que reflexionemos sobre lo siguiente:
·
La Constitución Política
de Colombia es un pacto colectivo
que se desarrolla en nuestras Leyes, Normas y Decretos. Cuando se ha violado de
manera evidente esta normatividad, ¿a
qué educación, legalidad y respeto nos están invitando cuando nos dicen que hay
que construir una, “ANTIOQUIA LA MAS EDUCADA, LEGAL Y RESPETUOSA POR EL MEDIO
AMBIENTE”?
2.
VELO - DE LO ECONÓMICO:
Todo proyecto requiere de un PRESUPUESTO
Y CIERRE FINANCIERO para ejecutarlo. Es obligación del dueño del proyecto -Gobernación
de Antioquia-, darlo a conocer e informar a la ciudadanía de dónde proviene el
dinero y cómo se va a distribuir.
Sobre este tema, la Veeduría presentó a la Gobernación varios Derechos de
Petición en la búsqueda de claridad. Cuando ésta respondía, no lo hacía de
manera clara y detallada. De la misma manera, las Reservas de la Sociedad
Civil, han experimentado lo mismo. Se ha violado su derecho a conocer el
presupuesto vigente del megaproyecto.
Preguntémonos:
¿Cuánto les cuesta a nuestras veredas, a nuestros vecinos, a nuestros
amigos, a nuestras familias, a nuestros seres queridos, a nuestros hijos, a
nosotros mismos, perder el agua?
¿Estamos dispuestos a perder nuestras tierras, nuestros cultivos, nuestra
forma de vida?
¡Una tierra sin agua no vale nada!
¿Cuánto nos cuesta social, económica y culturalmente, dañar la Reserva
Forestal Protectora Nacional del Río Nare y las Reservas Naturales de la
Sociedad Civil, fuente y soporte de nuestras vidas?
¿Qué significa lo que ahora llaman impuesto social? Impuesto es impuesto
aquí y en Cafarnaúm.
¿Qué papel juegan los urbanizadores en este proceso? ¿Qué intereses los
mueven? ¿Tendrá esto que ver con la burbuja inmobiliaria?
Así es como este
proyecto provoca la fragmentación de la tierra, la densificación y la demanda
de más servicios públicos.
No olvidemos otras experiencias. Lo que pasó y continúa sucediendo con el
Túnel de Occidente. ¿Acaso no nos sirve
de referencia? Lo que ha pasado igualmente con otros túneles en el país, ¿tampoco nos sirve de referencia?
¿Acaso estos megaproyectos no han generado un desplazamiento promovido, por;
la reducción, afectación y agotamiento del agua, el incremento del impuesto
predial?
¿Qué es lo que se estaría valorizando? ¿Este megaproyecto a qué le agregaría
valor?
¿Cuál sería el costo de todo lo que nos estarían quitando?
¿Qué nos costaría más, hacerlo? o ¿no hacerlo?
Este megaproyecto y su trazado pondrían en riesgo el agua, la flora y la
fauna. En síntesis, nuestro ambiente.
¡Una tierra sin agua no vale nada!
3.
VELO – DE LO SOCIAL
De otras experiencias
Ahora analicemos, el megaproyecto Túnel de Occidente, ¿no ha fracturado los
lazos de solidaridad, vecindad, pertenencia y memoria, valores que le dan
sentido a nuestras vidas?
¿Nos hemos preocupado por saber qué pasó con las personas de San Sebastián
de Palmitas y de San Cristóbal impactadas por la construcción del Túnel de
Occidente?
¿Nos hemos preguntado qué pasó con las personas que padecieron las fallas
en el sistema de preinyecciones en
la construcción del Túnel del Río Manso, en el Departamento de Caldas?
Tecnología ésta que se
utilizaría también en el túnel de oriente.
De Cultura Silletera y
territorio
¿Estamos dispuestos a permitir la violación de la Ley, que declara al
corregimiento de Santa Elena y sus habitantes, como origen y gestores de la
tradición de los silleteros, y a éstos como patrimonio cultural de la Nación? es por esta razón, que este
territorio y sus habitantes no se pueden intervenir sin permiso previo de la
autoridad responsable, el Ministerio de Cultura.
¿Contrariando la Ley, vamos a permitir que se desconozcan todas sus
expresiones culturales y artísticas como parte integral de la identidad y
cultura del departamento de Antioquia?
Sobre la manipulación de
la participación y la información
Como producto de las Audiencias Públicas Ambientales convocadas por Cornare
sobre el megaproyecto Túnel de Oriente, ¿qué uso le ha dado CORNARE a los
argumentos; éticos, legales, técnicos, económicos, sociales y ambientales, que
demuestran que dicho proyecto es imposible
en todos estos niveles?
Les contamos la respuesta: OTORGO LA
LICENCIA AMBIENTAL AL MEGAPROYECTO.
¿Cómo puede una comunidad participar si no ha sido informada de manera
veraz y oportuna sobre las afectaciones que provocaría el megaproyecto?
Somos una comunidad que no ha sido escuchada verdaderamente y sus acciones no
han sido tenidas en cuenta, al momento de tomar decisiones que comprometen su
futuro.
El megaproyecto ha utilizado una serie de estrategias para acallar nuestra
participación decidida por la defensa de nuestros recursos naturales. Nuestra Constitución
Política expresa que vivimos en un Estado Social de Derecho que privilegia la
participación ciudadana.
Cuidado: una comunidad
desinformada no está en condiciones de participar y de defender sus derechos
fundamentales y sociales.
Como bien lo dice la CONTRALORÍA GENERAL DE LA REPÚBLICA en su Función de Advertencia, en la
que, “Se advierte que de continuar la situación
de omisión a sus funciones, objeto y finalidad de cada una de las entidades
advertidas, frente a la amenaza potencial al medio ambiente que configura la
construcción del "Proyecto Túnel de Oriente", con los aspectos
señalados en precedencia, se podría estar generando daño al patrimonio estatal, al considerar el agua superficial y subterránea bienes de la nación, además de
afectar derechos fundamentales y
sociales de los habitantes del corregimiento
de Santa Elena, y de los Valles de Aburra y San Nicolás”
4.
VELO - De LO TÉCNICO
Sí se pueden construir
túneles, pero no en todos los lugares del mundo.
No es lo mismo construir un túnel en Europa, donde los complejos
hidrogeológicos son antiguos y estables, que en la montaña de Santa Elena.
Ellos, nos quieren dar a entender que es lo mismo hacerlo en complejos
andinos geológicamente jóvenes, en donde existen áreas muy frágiles, altamente
vulnerables, con baja capacidad de recuperación ante las afectaciones y que
prestan valiosos servicios ecosistémicos y vitales, como lo es el
abastecimiento de agua.
Por ejemplo, en los estudios
complementarios se afirma, “los daños sobre el agua van a ser de
insignificantes a despreciables”. Esto es irresponsable e irrespetuoso con los seres humanos y con el agua como
sustento vital de toda sociedad.
Igualmente, el lenguaje ha sido manipulado constantemente para hacer más
fácil la aceptación de la información, por parte de los habitantes. Lo anterior
distrae e impide que la gente entienda lo que significa perder miles de Metros cúbicos de agua diaria. Para una población
como la del Corregimiento de Santa Elena y los usuarios de los acueductos de la
región, como son; Acueducto ASUASI, Yarumaguas, ARSA, Conhydra, Aguas del
Mirador y Acueducto El Progreso.
Es igualmente irresponsable afirmar; primero, que los acueductos veredales
de esta zona tienen actualmente un déficit de agua hasta del 40 %. Segundo que
si esto se agudiza la Concesión abastecería los requerimientos con carro tanques,
tubería e incluso acueductos alternos.
Lo anterior nos alerta a mirar lo que está ocurriendo en Santa Marta, donde
ya existen problemas de orden público por la disputa para obtener agua de los
carro tanques. ¿Queremos que nos pase lo que está sucediendo en Santa Marta, la
Guajira y Yopal? En estas zonas la carencia de agua ha sido objeto de disputa y
causa de enfermedades como la hepatitis y la enteritis.
Los estudios
complementarios
Según la concesión, el sistema de preinyecciones garantizaría la no pérdida
de agua. Esta falsedad la ha desvirtuado la misma Autoridad Nacional de
Licencias Ambientales – ANLA afirmado lo siguiente:
“Las preinyecciones son
medidas constructivas tendientes más bien, según lo afirma el mismo estudio
complementario, a evitar la entrada de
agua al túnel y facilitar el proceso de excavación del mismo. La
experiencia en el país con otros túneles ha demostrado, que a pesar de haber
llevado a cabo estos procedimientos, la incidencia sobre las aguas
superficiales y subterráneas ha sido
nefasta, llegando a producir el desecamiento de un alto porcentaje de las aguas
superficiales, con el consecuente efecto sobre los ecosistemas asociados y
sobre la población que hace uso de tal recurso”
¿Están Ustedes dispuestos a permitir que las aguas superficiales y
subterráneas se pierdan a causa de este megaproyecto?
5.
VELO – DE LO INSTITUCIONAL
El Ministerio de Ambiente, como autoridad estatal superior en materia
ambiental, tiene el deber supremo de garantizar la conservación de las áreas
especialmente protegidas por la Constitución, las leyes colombianas y los
tratados internacionales que el país ha suscrito en relación con el agua.
Efectivamente, las acciones interpuestas por esta Veeduría recientemente,
están enfocadas en esta obligación que no ha cumplido el Ministerio en
particular, con este megaproyecto.
A lo largo de la historia de este megaproyecto se ha puesto en evidencia que
ha importado más lo privado, que lo público. Se ha perdido la confianza que la
ciudadanía puede tener en las personas que representan a las instituciones ambientales.
Ahora bien, en el país estamos construyendo un proceso de paz que todos anhelamos
y compartimos ¿Cómo es posible construir este proceso de manera adecuada, cuando
se violentan nuestros derechos y erosionan el principio fundamental para la paz,
como lo es la confianza?
6.
VELO – DE LO POLÍTICO
Un megaproyecto donde priman los intereses de un grupo de empresarios y
existe la alianza evidente entre algunos sectores políticos, y que quienes sin
vacilar se han constituido en defensores de este megaproyecto, tratan de
hacernos creer que sus intereses son los intereses de toda nuestra sociedad. Están
poniendo sus intereses por encima de las responsabilidades que tienen con la
ciudadanía y a quien están representando.
¿Entonces, a quién representan realmente los políticos que actúan en nuestro
nombre en las corporaciones públicas?
7.
VELO - DEL TERRITORIO
Un territorio es más que la geografía que nos rodea. Es un espacio físico
construido gracias a la interacción de sus moradores.
Así es como el megaproyecto Túnel de Oriente atenta contra esta noción de territorio.
De qué manera:
·
Altera el tejido social
y las relaciones que le dan sentido.
·
Destruye la riqueza
natural que lo sustenta y lesiona en gran parte sus expresiones culturales.
·
Viola la autonomía de
los Municipios del Altiplano del Oriente Antioqueño y sus Planes de Ordenamiento
Territorial.
·
Nos impone un modelo de
desarrollo desde Medellín.
·
En el mediano y largo
plazo los municipios del oriente antioqueño se convertirán en suburbios de la
capital. Por consiguiente, heredarán todos los problemas asociados a este
perverso modelo de crecimiento, que no es
de desarrollo.
¿Es este el modelo de desarrollo que queremos los habitantes del oriente
antiqueño? Sus líderes hace 20 años luchaban de manera decidida para que este
valle no se convirtiera en el segundo piso de Medellín, ¿Lo vamos a permitir?
Hoy vemos con tristeza que esta visión utópica como posible, se convertiría
en la pesadilla que heredarán nuestros hijos.
La Veeduría Ciudadana continuará con su misión de vigilar atentamente este
proyecto y denunciar las irregularidades.
Los invitamos a que nos acompañen, puesto que la vida y nuestro futuro
dependen de todos y es una construcción colectiva de la que nadie debe eludir
su responsabilidad.
Nosotros hemos asumido la nuestra. Esperamos lo mismo de cada uno de ustedes.
GRACIAS POR SU ATENCIÓN
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